Tú, la más hermosa flor, germinaste en tu vientre una semilla, que cuidaste por mucho tiempo para que creciera, y tuviera donde alimentarse y protegerse de toda maldad cumpliendo con todo esto, un mandato divino, un maravilloso y hermoso acto de amor cada día.
Dios puso en ti el cariño para tan noble misión te dio el valor suficiente, el coraje de luchar la templanza para guiarme, para hacer que no me faltara nada y que siempre estuvieras allí, darme la enseñanza en cada Palabra, y los más hermosos momentos de consuelo en mis caídas y fracasos que se convertían como espinas en tu corazón.
Gracias por siempre estar a mi lado en ese momento en el que no hay nadie mas que me acompañe siempre estas tu para cuidarme y consolarme por siempre regalarme tu sabiduría por dar lo mejor de ti por todos esos sacrificios inmensos que haces para que yo pueda tener un futuro mejor GRACIAS por darme siempre ánimos para seguir adelante y nunca romper mis ilusiones para empujarme a seguir mis sueños y metas.
Le doy GRACIAS a Dios por darme tu compañía le pido que te llene de bendiciones y que perdones mis ofensas pues se que a un ser tan impecable como tu no debería ofenderle de ninguna forma mil Gracias madre por ser ese Apóstol del amor.
A ti madre te doy mi expresión mas grande de amor, TE AMO.
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